A pesar de haber transcurrido más de 15 meses desde el inicio de la guerra en Ucrania, Rusia continúa golpeando Kiev. Durante la madrugada pasada, se produjo un nuevo ataque nocturno contra la capital ucraniana, marcando el sexto en los últimos seis días. En este ataque, Rusia empleó «más de 30» misiles y drones, los cuales fueron interceptados por las defensas aéreas ucranianas.
«El terror persiste en Kiev con los continuos ataques aéreos. Los terroristas están desesperados y siguen bombardeando la capital sin cesar. Durante los últimos seis días, los ‘rusistas’ han llevado a cabo su sexto ataque aéreo contra la ciudad», informaron las fuerzas ucranianas. Rusia utilizó en este ataque una combinación de drones kamikaze Shahed, fabricados en Irán, que fueron lanzados desde «diversas direcciones», así como misiles de crucero disparados por aviones desde la región del Mar Caspio.
El gobernador de Belgorod informó que, como resultado de los bombardeos del ejército ucraniano en las localidades rusas cercanas a Ucrania, dos mujeres han perdido la vida y dos hombres se encuentran gravemente heridos. «El ejército ucraniano bombardeó un tramo de la carretera en la localidad de Máslova Pristan, en el distrito de Shebékino. Los escombros impactaron en varios vehículos, uno de los cuales llevaba a las dos mujeres que fallecieron en el lugar debido a las heridas sufridas», afirmó Viacheslav Gladkov en Telegram.
Por su parte, el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, expresó en Helsinki que esta guerra es un «fracaso estratégico que disminuirá considerablemente la capacidad militar, económica y diplomática de Rusia, así como su influencia en los próximos años».
Además, el enviado especial de China para la región euroasiática, Li Hui, ha reconocido después de su reciente gira por Europa que existen «dificultades» para que Ucrania y Rusia se sienten a la mesa de negociaciones y comiencen las conversaciones de paz.